Trucos de la abuela infalibles (julio)

No, no nos habíamos olvidado de esa sección que sabemos que te encanta, la de los trucos de la abuela de limpieza infalibles y es que nos hacen la vida tan fácil que no podemos prescindir de estos pequeños consejillos. ¿No te parece curioso pensar que con tanta tecnología al final un poco de limón y sal terminan arreglando los peores males? ¡Toma nota!

¡Mi bañera se llena de óxido!

Hay un truco de la abuela para esto que es infalible y que muchas personas llevamos usando bastante tiempo. Se trata de utilizar un pomelo y sal para darle vida a tu bañera y eliminar, poco a poco, las manchas de óxido. Úsalo y nos cuentas qué tal te fue. Si lo prefieres, puedes usar los productos específicos que tenemos en la tienda de HogarCheck que van fenomenal.

Mi teclado está lleno de suciedad ¿cómo lo limpio?

No es el truco más sofisticado pero sí que funciona. Lo primordial es que tengas el ordenador apagado para que al tocar las teclas no actives alguna función que no desees o hagas algún daño al equipo. Después, coge un paño húmedo (asegúrate de que no chorrea) y pásalo sobre las teclas con suavidad. Para lidiar con aquellas manchas que no salen en los bordes de las teclas, usa bastoncillos humedecidos con alcohol diluido en agua. ¡Tu teclado quedará como nuevo!

¡No consigo quitar la suciedad de mi horno!

El horno es uno de los electrodomésticos más difíciles de limpiar, sin duda, pero no te preocupes porque también hay un truco de la abuela infalible para esto. Se trata de hacer una pequeña mezcla con bicarbonato de sodio, detergente para platos y un poco de vinagre. Extiéndela por el horno, déjala actuar 15 minutos y luego simplemente retira los restos con un trapo y pasa una bayeta húmeda. Fácil ¿no? Si no quieres complicarte la vida, en nuestra tienda de HogarCheck tenemos los mejores productos específicos para dejar tu horno como nuevo.

¿Cómo limpiar los juguetes de mis hijos?

Los juguetes de los más pequeños siempre tienden a acumular muchas bacterias y gérmenes que pueden ser muy nocivos para ellos. ¿Qué tal si los desinfectamos? Es muy fácil con tu lavavajillas. Eso sí, tienen que ser de plástico o materiales que puedan lavarse en este electrodoméstico.

Estos han sido los trucos de la abuela de limpieza que compartimos contigo en esta sección pero, como siempre, te invitamos a que compartas tu experiencia con nosotros y que nos cuentes cuáles son esos truquitos caseros que tú también usas para que las tareas difíciles de la casa sean coser y cantar. 

Rincones de la casa que no debemos olvidarnos de limpiar

Lo cierto es que una casa, si lo miramos bien, es un espacio muy grande en el sentido de que hay muchos elementos en ella y a la hora de hacer la limpieza hay algunos que se nos quedan atrás. Este artículo puede servir bien como un pequeño recordatorio sobre aquellos rincones de la casa que no debemos olvidarnos de limpiar.

Interruptores

Son pequeños y a veces no les damos mucha importancia pero hay que tener en cuenta que constantemente están pasando manos por encima de ellos, especialmente de noche. Con el contacto, la suciedad de las manos o la propia grasa que poseemos se va quedando adherida a ellos poco a poco dando lugar a un cultivo de gérmenes y bacterias que conviene tener controlado. Con un paño húmedo y algún desinfectante o limpiador suave será suficiente. Es importante hacerlo todas las semanas.

Esquinas

Sobre todo nos olvidamos de ellas cuando se encuentran al lado de algún mueble. Aquí se va acumulando polvo y se va creando un microambiente que puede dar lugar a la aparición de algunos insectos poco deseables para mantener nuestro hogar limpio. Aunque sea una vez cada quince días o cada mes, conviene mover un poco los muebles para llegar a esas esquinas que se nos escapan y tener su limpieza controlada.  

Paredes

Las paredes no son algo que solamos limpiar a menudo pero que, sin embargo, deberíamos, porque en ellas también pueden acumularse mucho polvo y algo de suciedad, dependiendo de la localización de la pared. En este post te enseñamos cómo limpiar las paredes correctamente según el tipo que sean.

Zócalos

Los zócalos son otro de los rincones de la casa que no debemos olvidarnos de limpiar. Son esas baldosas que se encuentran justo en la parte inferior de la pared y al igual que pasa con las esquinas, pueden ir acumulando mucha suciedad por lo que al menos cada quince días o cada mes conviene que nos detengamos a limpiarlos. Si te resulta más sencillo, puedes limpiar cada semana los de una o dos habitaciones para que no te de tanto trabajo de golpe.

Parte superior de los muebles

Con las prisas a veces se nos puede olvidar y el polvo también cae aquí así que es importante que todas las semanas, con la limpieza general, le demos un repaso a la parte superior de los muebles, no sólo para retirar el polvo sino también la suciedad (grasa, etcétera) que pueda quedarse adherida. Esto puedes hacerlo cada quince días o un mes y fácilmente con un poco de agua tibia y un limpiador suave para dejarlos como nuevos.

Estos han sido los rincones de la casa que no debemos olvidarnos de limpiar que te hemos recordado desde HogarCheck. ¿Nos hemos olvidado alguno que creas importante? ¡Déjanos un comentario!

Cómo cuidar los suelos de tarima

Los suelos de tarima son muy frecuentes en muchas casas y si hay algo que es cierto es que son mucho más delicados que los suelos comunes y, por tanto, su mantenimiento requiere mayor cuidado. ¿Vas a poner un suelo de este tipo y no sabes cómo mantenerlo? ¿Lo tienes pero no estás segura de conocer todos los secretos para cuidarlo como deberías? En este post te enseñamos cómo cuidar los suelos de tarima correctamente.

Lo primero que debes saber sobre los suelos de tarima es que, aunque son una alternativa perfecta a los suelos de madera y son menos delicados que éstos, también hay una serie de factores que pueden influir en su estado y que debes conocer, además de unos cuantos consejos.

Evita que le den directamente los rayos de sol

Uno de estos factores de los que te hablamos es el sol. Si hay partes de la casa en las que el sol entra por alguna ventana y da directamente sobre el suelo de tarima, será mejor que pongas un protector solar o una cortina porque, a la larga, los rayos del sol pueden cambiar las propiedades del material del suelo y dejarle un aspecto deteriorado que desentone con el resto. También puedes usar alfombras si no quieres perder luminosidad en la casa.

¡Cuidado con arrastrar los muebles!

El otro enemigo de los suelos de tarima son los rayones así que lo ideal es que intentes evitar andar con tacones, tener mucho cuidado al mover muebles y al arrastrar sillas. Para esto último lo mejor es colocar protectores en las bases de los muebles.

Usa alfombras

Te serán de gran ayuda para cuidar los suelos de tarima si las colocas en la entrada de la casa porque así, quienes pasen por la puerta, podrán retirar los restos de tierra u otras sustancias de la suela de los zapatos para que al pisar sobre el suelo de la casa no se raye.

El mejor proceso de limpieza

Para cuidar los suelos de tarima la mejor forma de proceder es retirar primero el polvo de toda la superficie con una mopa o una aspiradora. Después fregando el suelo con un poquito de agua templada y un chorrito de limpiador para suelos, suave. Finalmente, si quieres sacarle todo el brillo, prueba a mezclar 1/3 tazas de vinagre y dos chorros de lavavajillas líquido en un cubo de agua caliente. Ahora friega la superficie de la tarima en la dirección de las rayas de ésta y deja que se seque. Tus suelos habrán quedado como nuevos.